“Saltburn”: el thriller del año
La película protagonizada por Barry Keoghan sorprende no sólo por su trama, sino también por el efecto sorpresa que genera a lo largo de cada escena.
Por Sara Fernández
Mientras lucha por encontrar su lugar en la Universidad de Oxford, el estudiante Oliver Quick (Barry Keoghan) se ve arrastrado al mundo del encantador y aristocrático Felix Catton (Jacob Elordi), que le invita a “Saltburn”, la extensa finca de su excéntrica familia, para pasar un verano inolvidable.
En términos generales, el film que guionó y dirigió la británica Emerald Fennell, por su trama parece un poco cliché, pero les aseguro que no. Desde el principio te verás sumergido en la oscura historia y poco a poco comenzarás a caer en las redes de Oliver, que con su cara de bueno consigue la amistad inquebrantable de Felix.
Conforman el cast Rosamund Pike (quien interpreta a Elsbeth, la frágil madre de Catton), Richard E. Grant (Sr. James, el padre freak de Felix), Archie Madekwe (Farleigh, chupasangre de la familia Catton) y Alison Oliver (Venetia, hermana de Felix).
Los personajes secundarios tienen un rol muy importante en “Saltburn”, ya que cada uno arrastra sus propios demonios e inseguridades que los llevarán uno a uno a la desgracia absoluta.
Oliver y Felix forman un dúo soñado, en el que sus miradas, lo que dicen y lo que no se dicen, transmiten gran parte de lo que es la esencia de la película.
“Saltburn” te mantiene todos los sentidos despiertos y maneja a todos en un muy buen nivel. Los estadíos son de pena, bronca, emoción, asco, excitación y cuando creías que todo había pasado, aún pasa más, dejándote extasiado pero aún sediento de qué es lo que va a pasar.
El film ya fue estrenado en distintos festivales y la crítica ha sido maravillosa: “La anárquica sátira clasista de Emerald Fennell es la inyección de energía que el cine británico necesita”, escribió el periodista de cine Robbie Collin en el diario británico Telegraph. Ahora es el turno de que todos la vean. No queremos spoilear mucho más, júzguenla ustedes mismos.