Britney Spears: A 20 años de recibir su estrella en Hollywood Walk of Fame
La cantante estadounidense se convirtió en la más joven en recibir aquella distinción en ese momento. Te contamos su camino hacia el reconocimiento.
Por Sara Fernández
Hay artistas que esperan muchísimos años en ser distinguidos en el famoso Paseo de la Fama de Hollywood y Britney Jean Spears, mejor conocida simplemente como Britney Spears, lo logró sólo en cuatro años de carrera y antes de que se lo dieran a Madonna, quien tuvo que aguardar hasta 2008 para recibir su reconocimiento.
La nacida en Misisipi tenía 21 años cuando ingresó en dicho paseo histórico, pero desde que tenía tres se formó para ser una verdadera superstar. Sus primeros pasos fueron cantar en concursos de su ciudad, luego vinieron apariciones en la televisión, de los que se destacó su participación en la sexta temporada de “The All New Mickey Mouse Club”. Dicho show, por desgracia, fue cancelado en la siguiente temporada.
Spears tuvo que volver a su pueblo y continuar con su vida normal, pero ella sabía que pronto su realidad iba a tomar un rumbo diferente. Su primer contacto importante fue en 1997 con el mánager Lou Pearlman (el mismo de los Backstreet Boys y NSYNC, las boy bands más importante de aquel momento), quien quería meterla en un grupo femenino al estilo Spice Girls. Lynne, la madre de la cantante, consultó con un abogado, quien le aconsejó que Britney grabara un demo profesional para poder presentarlo a distintas discográficas.
Así fue como la artista se reunió con ejecutivos de cuatro compañías distintas en un sólo día, siendo rechazada por tres. Tuvo que esperar durante dos semanas la respuesta de una de ellas: Jive Records, quien finalmente la contrató. Britney Spears voló a Suecia y grabó durante un mes parte de lo que iba a ser su primer álbum de estudio. Uno de los productores fue nada más ni nada menos que Max Martin.
Cuando la también bailarina volvió a Estados Unidos, ya tenía preparada una gira promocional en centros comerciales para difundir parte del disco que estaba por sacar. Acompañada de dos bailarines, la presentación duraba alrededor de 20 minutos en donde Spears cantó “(You Drive Me) Crazy”, “Born to Make You Happy/Thinkin' About You/Deep In My Heart”, “Sometimes” y “...Baby One More Time”, esta última volvía locos a los presentes hacia el final, ayudando así a que poco a poco la canción se vuelva en un éxito total.
La simpatía que la cantante generaba con el público, hizo que rápidamente la eligieran para telonear a NSYNC. Finalmente, a principios de 1999, su álbum debut salió a la luz: ...Baby One More Time. El mismo llegó al número uno del Billboard 200 de Estados Unidos y fue certificado dos veces platino por la Recording Industry Association of America (RIAA) después de un mes. En todo el mundo el disco, que en su tapa dejaba ver a una Britney aniñada e inocente, encabezó las listas en quince países y vendió más de 10 millones de copias en un año. De esta forma, ...Baby One More Time se convirtió en el álbum más vendido de una artista adolescente.
Los videoclips de la estrella pop ayudaron a la difusión de ...Baby One More Time. Si bien el video del tema del mismo nombre del disco se volvió un clásico (la colegiala católica), “(You Drive Me) Crazy” fue la pieza visual que terminó de enloquecer a todos. Con su coreografía en una discoteca utilizando sillas, teniendo de actriz invitada a Melissa Joan Hart, de “Sabrina the Teenage Witch”, todo combinaba con el sueño adolescente del momento.
Luego vinieron los videoclips más tranquilos y melancólicos como “Sometimes”, “Born to Make You Happy” y “From the Bottom of My Broken Heart”. Había un video para cada estilo de los jóvenes, lo que ayudaba a que la música de Britney Spears sea masiva e inclusiva.
Rápidamente llegó el segundo álbum de la estadounidense: Oops!... I Did It Again (2000), en donde la imagen de Spears cambió radicalmente de niña a una joven sexy y segura de sí misma. “No soy tan inocente”, reza la canción del mismo nombre, acompañada de una pieza visual en el espacio vestida de un entero de látex rojo y una coreografía digna de challenge.
Luego vinieron el empoderado “Stronger”, un himno feminista hoy en día, la sensual y tierna “Don't Let Me Be the Last to Know” (escrito por Shania Twain) y la emocionante “Lucky”, que resuena mucho ahora después de todo por lo que ha pasado la princesa del pop: “Tiene mucha suerte, es una estrella/ Pero ella llora, llora, llora en su corazón solitario”. El disco también incluyó un cover de los Rolling Stones, “(I Can't Get No) Satisfaction”, que interpretó en vivo en los “MTV Video Music Awards 2000”. En aquella ocasión demostró ser durante un poco más de cuatro minutos una de las estrellas más importantes en ese momento, que no sólo cantaba bien en vivo, sino que su rutina de baile era impecable.
Oops!... I Did It Again vendió más de 20 millones de copias en todo el mundo hasta la fecha, lo que lo convierte en uno de los álbumes más vendidos de todos los tiempos.
En aquella época, Britney confirmó su noviazgo con Justin Timberlake, el líder de NSYNC. A finales de aquel año memorable en su carrera, la cantante tuvo un aborto. Tal como adjudicó en su reciente libro, “The Woman in Me”, Timberlake decía que no estaban preparados para la paternidad. “El aborto fue una de las cosas más agonizantes que he experimentado en mi vida”, confesó en el libro.
Tras atravesar un momento muy doloroso en su vida, Britney Spears actuó en el espectáculo de medio tiempo del Super Bowl XXXV, junto con Aerosmith, NSYNC, Nelly y Mary J. Blige, pero sólo realizó su aparición en el tema “Walk This Way”, de Aerosmith, porque no era la protagonista de noche.
A finales del 2001, la artista presentó su tercer disco: Britney, material que la posicionó como un ícono pop, incorporando como productores a The Neptunes. El dúo liderado por Chad Hugo y Pharrel Williams escribió el hit más importante de Britney: “I’m a Slave 4 U”. Su videoclip mostraba a una Spears más sexual, acompañada de una coreografía que hasta hoy en día se sigue imitando en las redes sociales. Vale destacar su presentación en los “MTV Video Music Awards 2001”, con una temática wild, en la que hubo un tigre y una pitón de color amarilla, que la cantante se puso en sus hombros mientras bailaba. Sin dudas, fue una de las performances más importantes hasta el día de hoy en su carrera.
El álbum también dejó canciones como la poderosa “Overprotected” y “I'm Not a Girl, Not Yet a Woman” (escrita por la británica Dido y Max Martin), que formó parte de la banda sonora de “Crossroads”, la película en la que Britney Spears debutó como actriz. Le siguieron “Boys” (utilizado para el film “Austin Powers in Goldmember”) y “I Love Rock 'N' Roll”, un cover de Joan Jett & the Blackhearts (también utilizado para “Crossroads”).
Britney debutó en el primer lugar de ventas del Billboard 200 de Estados Unidos, donde se convirtió en el tercer disco número uno consecutivo de la artista. Britney vendió más de 15 millones de copias alrededor del mundo, con más de 4 millones vendidas sólo en Estados Unidos, donde fue certificado con cuatro álbumes de platino por la RIAA.
Tras unos meses fuera de la industria musical, en agosto del 2003, Spears reapareció en la apertura de los “MTV Video Music Awards”, junto a Madonna y Christina Aguilera, interpretando un mash-up de la reina del pop, “Like a Virgin” y “Hollywood”. En medio de la presentación, Madonna besó en la boca a Britney y Aguilera, lo que inmediatamente fue noticia en todo el mundo.
Tres meses después del “polémico” beso, la artista lanzó su cuarto disco de estudio: In the Zone. Del cual se desprendieron hits como “Me Against the Music”, junto a la reina del pop, en el que también compartieron un video histórico juntas. Le siguieron temas como “Toxic”, conocida como la primera canción censurada de Britney Spears, ya que todo el videoclip era subido de tono. Dicha censura ocasionó que “Toxic” se convirtiera en el cuarto single más vendido de la década, con ventas mundiales superiores a las 4 millones de copias. Además, ganó su primer y, hasta la fecha, único Premio Grammy en la categoría de mejor grabación dance.
“Everytime” posiblemente sea uno de los pocos temas más personales de la cantante hasta el momento. Muchos fans, luego de las declaraciones de Spears sobre el aborto que llevó a cabo, asocian “Everytime” con ese momento: “Y cada vez que te veo en mis sueños/ Veo tu cara/ Me esta persiguiendo/ Supongo que te necesito, bebé”.
Cuatro días después del lanzamiento del álbum, la intérprete fue incluída en el Paseo de la Fama de Hollywood. En la ceremonia, los gritos de sus fans fueron lo único que se escuchaba mientras ella caminaba contenta para agradecer dicho reconocimiento: “No puedo creer que estoy aquí con todos ustedes, mis increíbles fans, me siento muy honrada de que compartan conmigo este momento que no olvidaré nunca”.
Luego de posar para las fotos, Britney se acercó a firmar distintos objetos de sus seguidores, quienes la esperaron allí ansiosos. Luego se acercó a la prensa para contarles cómo se sentía frente a esta distinción tan importante: “Cuando tenía 10 años, mi papá había rentado un auto y vinimos de paseo por aquí. Ahora estar acá y formar parte es muy surreal, estoy muy feliz”. Un periodista latino le preguntó qué le diría a los jóvenes alrededor del mundo, a lo que ella contestó: “Nunca te des por vencido, siempre cree en ti mismo”, acompañado de un “gracias” en una perfecta pronunciación del castellano.
Lo que vino en la vida de la artista años después forma parte de otros capítulos en su vida. Creemos que es importante recordar que al menos hasta ese momento, Britney Spears aún llevaba encima su propia esencia que poco a poco y desafortunadamente con los años fue desapareciendo.
Cada uno de esos cuatro primeros discos de la cantante forman parte de la cultura musical de la primera década de los 2000, marcando así la infancia y la juventud de muchas personas. Actualmente, Spears está activa en las redes sociales, por lo general disfrutando de su tiempo libre y el éxito de su reciente libro de memorias que acaba de ganar el premio “Goodreads Choice Award”.
La también compositora prometió sacar a la luz un segundo libro autobiográfico y además en octubre pasado contó en Instagram que escribió una nueva canción: “Hate You to Like Me”, de la que aún no hay fecha de lanzamiento. Esperamos ansiosos por su vuelta a la música, pero por el momento tenemos el resto de su discografía para escucharla una y otra vez.